En 2026 la Fórmula 1 tendrá su cambio más fuerte en 12 años. El nuevo reglamento técnico puede llegar a abrir el juego y, en ese contexto, el equipo Alpine, donde corre el argentino Franco Colapinto, sería uno de los más favorecidos y apuntaría a estar en el lote de punta. Hay una serie de razones que pueden ilusionar a los fanáticos de nuestro país.
Si bien Colapinto aún no está confirmado para la próxima temporada como piloto titular, de continuar su rendimiento que le permitió superar a su compañero de equipo, Pierre Gasly, en dos de las tres clasificaciones y carreras (en Monza le ordenaron ceder su puesto al francés), el deportista bonaerense de 22 años se encamina a mantener su butaca. Sería lógico si se toman en cuenta las últimas declaraciones del asesor ejecutivo y hombre fuerte del team galo, Flavio Briatore, quien afirmó que “el equipo necesita estabilidad, y la posibilidad de conservar a los mismos pilotos forma parte de la estabilidad. Por el momento no hemos decidido, pero en condiciones normales, la estabilidad quiere decir que conservo a los dos”.
En el venidero campeonato los autos y neumáticos serán más chicos, se reducirá la carga aerodinámica (aditamentos), habrá igual erogación de potencia de los motores a combustión y eléctricos, y se usarán los combustibles sintéticos para reducir la contaminación. En los papeles y análisis previos, los impulsores que mejor rendirían serían los de Mercedes por sobre los de Ferrari, Honda y los ingresos de Audi y Ford, con Red Bull y Racing Bulls.
Alpine tiene el peor auto del presente ejercicio y, sin mejoras para el A525 en el resto de la temporada, los cañones siguen apuntados al próximo año, con la expectativa puesta en los motores de Mercedes, que reemplazarán a los Renault, cuya merma de potencia respecto del resto rondaría los 20/30 caballos.
Además, el futuro A526 tendrá caja y suspensión de la marca alemana y, de tener un buen chasis, accedería a un potencial competitivo en 2026. Para que el auto pueda responder desde la carrocería, contrataron a Kris Midgley, nuevo responsable de aerodinámica, que proviene de Ferrari. Su suma la incorporación de Oliver Bray, ingeniero de diseño mecánico, alguien que viene de trabajar durante ocho años en McLaren, el equipo que hoy es la referencia de la categoría y cuyos pilotos,Oscar Piastri y Lando Norris, pelean por el título.
En febrero de 2025, el asesor había destacado en una entrevista con La Gazzetta Dello Sport que uno de sus principales objetivos en el corto plazo era luchar por victorias en 2026 e ir en búsqueda del título en 2027, pero ahora su mirada tuvo una alteración sobre el proceso de mejora al que aspiran: “Podemos hacer podios el año que viene. Tenemos el potencial para estar en el top 6 e incluso en el Top 4 si todo va bien”.
Sin embargo, el último puesto en el Campeonato Mundial de Constructores no es visto como un drama en Enstone, sede del equipo Alpine. Es que, al estar en el fondo de la tabla, acceden a un 30 por ciento más de desarrollo en el túnel de viento, algo vital en la construcción de un monoplaza. El dato lo arrojó el propio jefe de Mercedes, Toto Wolff: “Cuando en un campeonato estás tan atrás como Alpine en este momento, recibes, creo, un 30% más de tiempo en el túnel de viento. Eso se acumula con los años, por lo que hay que tener cuidado”, alertó el austriaco en diálogo con Motorsport.
El mencionado medio publicó una nómina que revela cuántas tandas en el túnel de viento pueden hacer los equipos para el desarrollo aerodinámico. En la columna izquierda, el tiempo en % (desde el 23/06/2025), y en la derecha, las tandas en el túnel de viento (desde el 23/06/2025).
Ante estos datos, Wolff advierte que no se repetirá lo de 2014 con el inicio de la era híbrida, cuando Mercedes arrancó la etapa más gloriosa que cualquier equipo haya conseguido en 75 años de historia de la Máxima: 8 Campeonatos Mundiales de Constructores y 7 de Pilotos. “Tuvimos (en 2014) desde el principio una ventaja en la unidad de potencia”, recordó el austriaco. “Pero en el chasis no había competencia“, esgrimió.
Con las mejores chances de Alpine y McLaren, que defendería el título de Constructores (puede conseguirlo este fin de semana en Azerbaiyán), Wolff avisó que “tendremos una gran competencia dentro de casa”. Por eso el mandamás del team alemán admitió que “necesitamos un chasis competitivo, porque todos nuestros clientes van a usar el mismo motor”.
Respecto de ser un equipo oficial con el apoyo de la fábrica de Stuttgart, indicó que “creo que hasta cierto punto es una ventaja, porque marcas la dirección de cómo debe diseñarse toda la arquitectura. Pero si al chasis le falta rendimiento, porque no generas la misma carga aerodinámica, o porque produces demasiado drag (resistencia al avance), o porque has pasado por alto ciertas lagunas o no has visto algunas innovaciones, entonces retrocedes».
Para Wolff, el dinero ya no es un condicionante excluyente para el éxito, más allá del límite presupuestario anual de 135 millones de dólares. “Poner a nadie bajo presión con dinero, lo que para los tres grandes equipos siempre había sido una especie de carta de ‘salida de la cárcel gratis’, eso ya no funciona”, subrayó Wolff.
“Y ni siquiera estamos hablando de Honda y Aston Martin, con mucho tiempo en el túnel de viento y con el factor Adrian Newey. Tal y como es hoy la Fórmula 1, con la normativa vigente, cualquiera puede tener éxito», concluyó el austriaco.
De momento, el objetivo de Alpine será poder empezar a salir del fondo de la tabla y este fin de semana intentará terminar lo más adelante posible en el Gran Premio de Azerbaiyán, en el circuito callejero de Bakú.